Querido Baúl:
¡Vaya con estas nostalgias! Por ese andar acomodando cosas en mi habitación, me topé contigo. Te miré largamente, acaricié tu tapa, quitando restos de polvo. Miré la cerradura, que no es tal, es esa bisagra larga que guarda el candado pequeño y en este caso abierto. Nadie más que yo hurga en mis cosas.
Te abro, tratando de recordar lo que ha merecido guardarse allí. Mucho más, seguro, ha debido o debe estar allí. Pero es el baúl de los años de antaño. Encuentro fotografías, familiares, mías de recién nacida, me asombra ver a esa pequeña, soy yo y sin embargo tomando el sol en el jardín de la casa que me vio nacer, sobre esas mantas, sólo miro a una bebé que ya despuntaba robusta y parecida a mi padre. Me cuesta pensar soy la misma, claro , allí en proyecto de absorber lo que la vida en mi vivir, me tenía deparada.
¡Oh, qué lindo! estaba aquí, la fotografía que atrapó en el tiempo la primera vez que vi al mar, ver el Lago de Maracaibo, cruzarlo en sus ferrys era ya un asombro. Mirar el mar, otear su horizonte, aspirar su aroma, caminar sobre la arena cálida de esa playa,litoral y famosa de entonces, me hizo comprender a mis pocos años, que existen inmensidades que los ojos no pueden captar.
Más fotografías, de mis padres, hermanos, tíos, ya casi todos los tíos nos han dejado, como los amigos del alma que allí también están atrapados en el tiempo.
Estampitas de santos, papelitos con pensamientos, una agenda con mis primeros escritos; lápices que ya ni madera tienen, mi primera pluma. Dibujos que hice y que nunca quise tirar; recortes de periódicos, revistas, todos, doblados cuidadosamente.
Encuentro, amores que fueron, que son hoy esa otra parte de mí indisoluble. Allí están, junto con una servilleta y un poema escrito en ella, una declaración de amor con dibujitos de corazones, aquellas cartas que me escribieron. La letra de las canciones que me dedicaron un día. Lazos de algún regalo, junto con las cajitas forradas en papeles lustrosos. El pasaporte caducado de un viaje hecho fuera del país. Unas monedas, (colecciono monedas), como colecciono promesas. Si, por extraño que parezca, en mi baúl, encontré revoloteando miles de promesas que me hicieron y quedaron no cumplidas y algunas otras que yo no cumplí. Allí están. Promesas de matrimonio. Promesas de “vámonos, toma mis manos” o de “esto es para siempre”, dicho de parte y parte, sin pensar que el siempre no existe.
Lo extraño es, que sin abrir el baúl, sin guardar nada más, aparecieron nuevas promesas, ilusiones que se han ido rompiendo y entonces, encuentro jirones de vida, trozos de corazón, una botellita en cuya etiqueta se lee: “lágrimas”. Busco más hacia el fondo y sí, también está la cajita de las risas, carcajadas, felicidad sentida antes de cada promesa incumplida o las llevada a cabo.
Te contemplo Baúl, con singular esmero y con la nostalgia llenando mis pupilas. Vuelvo a acomodar lo que fui sacando, quizás alguna ilusión se haya escapado, a lo mejor se evaporaron algunas lágrimas, como también es posible que el sonido de las risas haya aumentado para acallar el silencio.
Termino mi tarea y acabo por cerrarte, sin candado, con la esperanza abierta de que en algún momento, vuelva a abrirte y al hacerlo, encuentre el amor sonriéndome y en las palmas abiertas, cara al sol, todas las promesas.
Me despido de ti, querido Baúl, no sin antes recordar la canción que llegó a mi memoria cuando te encontré:
El baúl de los recuerdos
Que poco significan las palabras
uuuh
Si cuando sopla el viento se las lleva tras él
Y quedan solamente los recuerdos
uuuh
Promesas que volaron y no pueden volver
Vive siempre con ilusión
si cada día tiene diferente color
Porque todo llega a su fin
después de un día triste nace otro feliz
Buscando en el baúl de los recuerdos
uuuh
Cualquier tiempo pasado nos parece mejor
Volver la vista atrás es bueno a veces
uuuh
Mirar hacia delante es vivir sin temor
Los recuerdos son el pasado
Cuando queda tanto por andar
Uuuuuh
Buscando en el baúl de los recuerdos
uuuh
Cualquier tiempo pasado nos parece mejor
Volver la vista atrás es bueno a veces
uuuh
Mirar hacia adelante es vivir sin temor
Si cada día tiene diferente color
Después de un día triste nace otro mejor
Buscando en el baúl de los recuerdos
uuuh
cualquier tiempo pasado nos parece mejor
Volver la vista atrás es bueno a veces
uuuh
Mirar hacia delante es vivir sin temor
Si cada día tiene diferente color
Después de un día triste nace otro mejor
Vive siempre con ilusión
si cada día tiene diferente color
Porque todo llega a su fin
después de un día triste nace otro feliz
Vive siempre con ilusión
si cada día tiene diferente color…
Fuente: musica.com
Karina
Te guardo con todo mi amor,
Yo
¡Vaya con estas nostalgias! Por ese andar acomodando cosas en mi habitación, me topé contigo. Te miré largamente, acaricié tu tapa, quitando restos de polvo. Miré la cerradura, que no es tal, es esa bisagra larga que guarda el candado pequeño y en este caso abierto. Nadie más que yo hurga en mis cosas.
Te abro, tratando de recordar lo que ha merecido guardarse allí. Mucho más, seguro, ha debido o debe estar allí. Pero es el baúl de los años de antaño. Encuentro fotografías, familiares, mías de recién nacida, me asombra ver a esa pequeña, soy yo y sin embargo tomando el sol en el jardín de la casa que me vio nacer, sobre esas mantas, sólo miro a una bebé que ya despuntaba robusta y parecida a mi padre. Me cuesta pensar soy la misma, claro , allí en proyecto de absorber lo que la vida en mi vivir, me tenía deparada.
¡Oh, qué lindo! estaba aquí, la fotografía que atrapó en el tiempo la primera vez que vi al mar, ver el Lago de Maracaibo, cruzarlo en sus ferrys era ya un asombro. Mirar el mar, otear su horizonte, aspirar su aroma, caminar sobre la arena cálida de esa playa,litoral y famosa de entonces, me hizo comprender a mis pocos años, que existen inmensidades que los ojos no pueden captar.
Más fotografías, de mis padres, hermanos, tíos, ya casi todos los tíos nos han dejado, como los amigos del alma que allí también están atrapados en el tiempo.
Estampitas de santos, papelitos con pensamientos, una agenda con mis primeros escritos; lápices que ya ni madera tienen, mi primera pluma. Dibujos que hice y que nunca quise tirar; recortes de periódicos, revistas, todos, doblados cuidadosamente.
Encuentro, amores que fueron, que son hoy esa otra parte de mí indisoluble. Allí están, junto con una servilleta y un poema escrito en ella, una declaración de amor con dibujitos de corazones, aquellas cartas que me escribieron. La letra de las canciones que me dedicaron un día. Lazos de algún regalo, junto con las cajitas forradas en papeles lustrosos. El pasaporte caducado de un viaje hecho fuera del país. Unas monedas, (colecciono monedas), como colecciono promesas. Si, por extraño que parezca, en mi baúl, encontré revoloteando miles de promesas que me hicieron y quedaron no cumplidas y algunas otras que yo no cumplí. Allí están. Promesas de matrimonio. Promesas de “vámonos, toma mis manos” o de “esto es para siempre”, dicho de parte y parte, sin pensar que el siempre no existe.
Lo extraño es, que sin abrir el baúl, sin guardar nada más, aparecieron nuevas promesas, ilusiones que se han ido rompiendo y entonces, encuentro jirones de vida, trozos de corazón, una botellita en cuya etiqueta se lee: “lágrimas”. Busco más hacia el fondo y sí, también está la cajita de las risas, carcajadas, felicidad sentida antes de cada promesa incumplida o las llevada a cabo.
Te contemplo Baúl, con singular esmero y con la nostalgia llenando mis pupilas. Vuelvo a acomodar lo que fui sacando, quizás alguna ilusión se haya escapado, a lo mejor se evaporaron algunas lágrimas, como también es posible que el sonido de las risas haya aumentado para acallar el silencio.
Termino mi tarea y acabo por cerrarte, sin candado, con la esperanza abierta de que en algún momento, vuelva a abrirte y al hacerlo, encuentre el amor sonriéndome y en las palmas abiertas, cara al sol, todas las promesas.
Me despido de ti, querido Baúl, no sin antes recordar la canción que llegó a mi memoria cuando te encontré:
El baúl de los recuerdos
Que poco significan las palabras
uuuh
Si cuando sopla el viento se las lleva tras él
Y quedan solamente los recuerdos
uuuh
Promesas que volaron y no pueden volver
Vive siempre con ilusión
si cada día tiene diferente color
Porque todo llega a su fin
después de un día triste nace otro feliz
Buscando en el baúl de los recuerdos
uuuh
Cualquier tiempo pasado nos parece mejor
Volver la vista atrás es bueno a veces
uuuh
Mirar hacia delante es vivir sin temor
Los recuerdos son el pasado
Cuando queda tanto por andar
Uuuuuh
Buscando en el baúl de los recuerdos
uuuh
Cualquier tiempo pasado nos parece mejor
Volver la vista atrás es bueno a veces
uuuh
Mirar hacia adelante es vivir sin temor
Si cada día tiene diferente color
Después de un día triste nace otro mejor
Buscando en el baúl de los recuerdos
uuuh
cualquier tiempo pasado nos parece mejor
Volver la vista atrás es bueno a veces
uuuh
Mirar hacia delante es vivir sin temor
Si cada día tiene diferente color
Después de un día triste nace otro mejor
Vive siempre con ilusión
si cada día tiene diferente color
Porque todo llega a su fin
después de un día triste nace otro feliz
Vive siempre con ilusión
si cada día tiene diferente color…
Fuente: musica.com
Karina
Te guardo con todo mi amor,
Yo