domingo, 20 de septiembre de 2015

A la Verdad

“Vale más saber una verdad, aún cuando sea difícil, vergonzosa o trágica, que ocultarla, porque aquello que se calla, es subordinado o adivinado por los otros y ese secreto, se convierte en un traumatismo más grave a largo plazo”
Claudine Vegh


Querida Verdad:

He sido siempre una abanderada de la verdad. Te prefiero aún siendo cruel,  que a la mentira, por más que la justifiquen, aunque habrá quien replique, que también la verdad tiene muchas caras y se  expresa según el cristal con que se mire.



De pronto, me detengo y pienso en las mentiras que envuelven vivir tras las máscaras que obliga la sociedad, la familia, los amores ocultos, la distancia en la memoria.  Me siento tonta útil de ti, de la verdad que quisiera gritar, de este torbellino  de velos grises ante los espejos que voy encontrando. Ser fiel a sí misma es el mayor de los retos, y lo soy, callada, sonriente, triste, enojada, superada por cada situación que vivo mordiéndome los labios y como dice Claudine Vegh, "
aquello que se calla, es subordinado o adivinado por los otros y ese secreto, se convierte en un traumatismo más grave a largo plazo”
Quizás por eso, dentro de mi mundo callado y tras las puertas de mi casa, pero bullicioso y sincero al retribuir el sentimiento que no se oculta cuando alguien toca mi corazón, no concibo, más mentiras y silencios y engaños y ocultamientos, porque exploto ya, a mis años otoñales, con la ira de llegar a los límites, a la frontera del abismo de no reconocerme ante palabras que saltan sin ser mis palabras habituales, que deploro por herirme más, quizás, que a quien van dirigidas.

Te escribo Verdad, porque ante cada papel donde se refleje mi tinta derramada, un mucho de ti en mi va de la mano, eludiendo las zarzas que dejan los engaños hechos de silencios.

Sigo mi camino, bajo mis pies el crujir de las hojas secas, con ellas, los recuerdos  se alejan día tras día sin piedad  de mi memoria.

De ti siempre seré, Verdad, porque a pesar de todo, te prefiero sin menoscabo alguno.

Sin más, recogiendo antifaces, se despide de ti,

Yo.


2 comentarios:

Unknown dijo...

Tiempo sin pasar. No me lo perdono. Como siempre he encontrado en tus cartas, moralejas, prosas, poemas y esa manera tan particular de tratar temas íntimos, sicológicos o llenos de filosofía. Sobre la verdad, dejas puertas abiertas. Un gusto leerte. Sincero afecto.

Jorge Luis.

KAMELUCHA,.,.,.,.,., dijo...

Demasiado tiempo sin pasar, ni leer las hermosas cartas
que siempre has escrito.....aunque esten un poquito alterados
los alrrededoress, escribe, escribe, jamas lo dejes de hacer
un saludo
carmela